Para quien no me conoce contaré, que fue el estrés el que me llevó a pintar; tenía una tienda, Ángeles & Demonios en barrio del Carmen de Valencia. Poco a poco se me iba al carajo, la moda se convirtió en un tipo de industria que ya no me atraía para nada, las marcas que vendía comenzaron a abrir sus propias tiendas y las franquicias llenaban los centros comerciales de los que huyo, ropa sin principios ni alma, sin personalidad ni calidad. Los estampados se repetían una y otra vez hasta convertirse en vulgares.
Así es que me tocó alquilar mi casa, pero el inquilino me dejó de pagar durante meses y meses.
Las noches se me hicieron cada vez mas largas y los nervios mas tensos, y me desvelaba todas las noches durante horas y horas hasta dejarme en los huesos. Sentí miedo a perder lo que tenía, impotencia por no poder hacer más de lo que hice, vergüenza por el qué dirán, ansiedad al enfrentarme sola a todo ese mogollón, ..
de verdad que no podía más.
Pero tenía ropa y pinturas, y me puse a probar.
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10 años Garabateando dan mucho juego.
Sonia Sempere
Garabatera Textil
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