Pinto a mano en prendas montañas que rodeen tu cuerpo.

Buceo con los ojos cerrados dentro de un beso,
viajo por dentro tuyo dejándome llevar por tus manos,
mojada por tu aliento... sintiendo.

Coloca tu mano junto a la mía y cierra los ojos, una larga fila de hormigas recorren nuestros cuerpos, escucho, que desde la puerta llaman obligaciones, estrés, lamentos, reproches y quejas del pasado... 

no abras insensato!!! 

que no interrumpan este momento de besos y caricias, no dejes que nada nos corte en vano y espera...

...espera que llegue la sombra de la noche,  aguarda que nos ilumine la luz de la Luna.

Retorceré mis montañas alrededor de todo tu cuerpo para poder tocarte siempre...
besarte.

Mis labios te besan hasta donde sólo ellos pueden llegar, 

mis dedos de colores harán el resto 

y las caricias que nunca te di...

te pintarán.

Dime, si soy árbol, qué hoja arrancarás primero.
Si soy mar, cual de mis olas arrastrarás a tierra para secar.
Pero si con el tiempo me convierto y reinvento, dime,
si fuera o fuese viento con fuerza,
qué derribaré primero,
 tu recuerdo, los miedos o esa soledad.

A lo alto del árbol he trepado y hasta desde allí veo,
que no has cambiado.

La niña que un día conocí,
veo en el espejo y si, continúa allí,
dentro de los ojos rasposos,
secos de tanto lagrimar un brillo me ataca,
y me dice que dentro de poco yo...
echaré a volar.

Duerme tranquila mi niña, 

que los árboles te harán de almo-hada 

y con su sombra te acunan, cuidan y cobijan.

 Duerme, sueña y descansa mi niña,

que llevas todo el día jugando a ser mayor

y estás rendida.

Nota:
Almo-hada,
Una mezcla que me apetecía hacer,
un pequeño juego de palabras,
 un querer volver a nacer,
una siesta entre olmos y hadas,
rebosante de placer.

Ropa pintada a mano, poco a poco, pieza a pieza:
Sonia Sempere
Fotos: Sonia Sempere

Texto: Sonia Sempere

Invitadas de corazón: Silvia y Alba.